Como es tradición, el Colegio San Gabriel de los Hermanos Gabrielistas, hace públicos un año más los datos relativos a la climatología de esta zona de la Ribera del Duero. Se trata de un estudio donde se recogen diariamente todas las precipitaciones en sus diversas formas, así como las temperaturas, la humedad y la presión atmosférica. Una vez se dispone de los datos diarios de todo el mes, se pueden ir haciendo cálculos en términos de medias aritméticas y de comparativas con los mismos meses de años anteriores. Del documento resultante se pueden extraer datos llamativos como que la máxima temperatura se registró en el mes de Junio siendo esta de 45ºC, mientras la temperatura mínima la encontramos en Enero con –10ºC. Si recordamos, en el 2011 la primavera, esa estación de tránsito que nos trae por igual días de sol y de lluvia, se vio reducida a unos pocos días dado que pasamos de las más gélidas a las más cálidas temperaturas en poco tiempo. Por este mismo motivo, las precipitaciones se vieron drásticamente mermadas en el pasado año, pues tuvimos un invierno seco que se alargó hasta el mes de Marzo y un prematuro verano que no defraudó con el rigor de su aridez. Aún así, y si las matemáticas no fallan, el 2011 con una temperatura media de 13,2º C fue un año en el que hizo menos calor que en años anteriores, aunque tuviéramos la sensación de que este había sido un año más caluroso, precisamente por esa anticipación de la época estival, sin embargo lo más destacable de este análisis no son la temperaturas, que están bajo los parámetros habituales, sino las precipitaciones que son anómalamente escasas. Podemos afirmar que el 2011 ha sido un año marcado por la aridez, ya que sólo se alcanzaron los 325 litros por metro cuadrado en todo el año, lo que le convierte en el año más seco de la última década. Los meses de Enero y Noviembre fueron los más lluviosos y aún así lejos de las cifras habituales con tan solo 68 y 57 l/m2 respectivamente. De forma paralela los meses de Abril y Mayo, en contra del esquema general de nuestro clima, apenas llegaron a los 50 l/m2 entre los dos, mientras que ninguno de los meses restantes sobrepasó los 45 l/m2 del mes de Marzo (ni siquiera Diciembre que en el 2009 y 2010 rozaba el centenar de l/m2 ). En cuanto al número de heladas, o lo que es lo mismo la cantidad de días que el termómetro ha marcado temperaturas bajo cero, el informe señala Febrero y Diciembre como los meses con las mayores cifras, 22 días cada uno. Estos son datos a tener muy en cuenta en una zona de producción vitivinícola tan importante como es esta. Cabe destacar, que en general el 2011 ha sido un año atípico, debido sobre todo a la escasez de precipitaciones con cifras más cercanas a un clima semidesértico que a nuestro clima mediterráneo rigurosamente continentalizado y a la caótica distribución de las temperaturas a lo largo del año, dejándonos con la sensación de haber disfrutado de un largo verano pero con la mente puesta en el campo y los agricultores. Este estudio climatológico revela que el año 2011 no se ha parecido a los últimos años y probablemente no se parezca a los venideros. Estamos viviendo entonces un cambio en los tipos de tiempo que ya no se repiten periódicamente para configurar el clima de nuestra región. Podemos afirmar igualmente que este estudio es especial, dado que incorpora, junto a todos estos datos climatológicos, otros elementos relevantes relativos a la fenología como son las fechas de llegada y salida de determinadas aves como el avioncillo, la cigüeña, la golondrina, el ruiseñor, la oropéndola etc, y que arrojan mucha información sobre el tiempo atmosférico y el clima. Datos que sólo pueden ser fruto de la contemplación atenta de la naturaleza que nos rodea. Un nuevo año ha comenzado y todos en San Gabriel recordamos emotivamente al Hno. Salvador, un enamorado de la educación y de la naturaleza que partió a la casa del padre el 28 de Septiembre de 2009. Nos deja muchos legados y enseñanzas entre otras la observación y análisis del clima durante más de treinta años y por eso nos disponemos con ilusión a seguir contemplando y tomando buena nota de todas las cifras y realidades que la naturaleza nos ofrece, especialmente el Hno. Elicio y la Pfra. Aintzane Bernaola que han recogido el preciado testigo del Hno. Salvador. Gracias a ellos podemos dar archivo a este estudio climatológico del 2011, pero conviene no esconderlo mucho pues lo necesitaremos seguro, para responder a algunas preguntas que seguiremos haciéndonos en un futuro próximo.